martes, 18 de agosto de 2015

Caos y peatones en riesgo; vecinos de la plaza Uyuni piden semáforos



Martha Copana, de 65 años, está acostumbrada a esquivar los vehículos cuando en su camino al Hospital Obrero cruza la avenida Saavedra hacia la Panamá. En la plaza Uyuni, donde convergen cinco arterias y existen seis bocacalles, no hay un semáforo. “Una debe darse modos para pasar. Este sectorcito es bien peligroso y mucho más para mí porque soy de la tercera edad”, afirma.

Pero en este espacio —remodelado y entregado en enero de 2012— no solo faltan semáforos para organizar el tráfico de cientos de vehículos y transeúntes por sus cinco arterias bidireccionales, sino agentes de tránsito. “Aquí deben poner un semáforo, porque no se puede cruzar. Vivo en la Iturralde y después de entrar a la rotonda ya me es difícil cruzar, ya sea a la Saavedra o a la Panamá”, cuenta Sonia Vargas.

“Es casi imposible pasar por la noche por la trancadera y porque uno puede ser sorprendido por un minibús”, indica Óscar Maldonado, quien trabaja en un taller mecánico de la calle Yungas. En esta plaza desembocan las siguientes arterias: Saavedra, Casimiro Corral, Panamá, Héroes del Pacífico y Abel Iturralde.

Parálisis. Los choferes, por su parte, se quejan por el congestionamiento vehicular en las horas pico; de 08.00 a 08.45; de 11.30 a 12.45; y de 18.00 a 20.30. “Desde las seis de la tarde, la trancadera es insoportable y uno tarda más en este sector que en la avenida Sucre”, comenta Adolfo Perca, transportista de la línea de minibús 955, que presta el servicio entre la Terminal de Buses y Villa Fátima.

Juan Colque, chofer de la línea 247, sube desde el estadio Hernando Siles por la Saavedra con destino a Villa El Carmen también protesta por el embotellamiento.

“Debo ir por la avenida Héroes del Pacífico para empalmar con la Busch, pero a veces quedamos atrapados por la trancadera en la plaza Uyuni, porque el congestionamiento llega hasta el estadio”. Los vehículos que se dirigen al centro de la ciudad de La Paz o a los barrios de Sopocachi, al Macrodistrito Sur y otros también quedan atrapados en el caos.

“Los autos entran por la Panamá, otros bajan desde la Iturralde y con los que vienen de Villa Fátima al centro no se puede avanzar. Aquí debe haber un semáforo”, opina Felipe Gonzaga, chofer la línea de minibús 364.

La Razón trató hablar con el secretario Municipal de Movilidad, Transporte y Vialidad, Ramiro Burgos, pero la autoridad mandó a decir que estaba en una reunión y que para entrevistarlo, primero se gestione la autorización de la Unidad de Comunicación.

El responsable del Control Social, Freddy Bustillos, solicitará que esa repartición haga una inspección para ver la factibilidad de instalar un semáforo en la plaza Uyuni. “Pedimos que se haga un estudio a Vialidad para que defina si es necesario un semáforo. Hay que tomar en cuenta que son seis los accesos. No-sotros iremos a la Secretaría para explicar esta preocupación”.

Gloria Ortiz, dirigente de la zona, expresa que enviará una carta a la Alcaldía. “Ellos verán si es necesario uno o dos semáforos, en especial en la calle Panamá y en la avenida Saavedra”.

Tránsito. Sobre la ausencia de agentes de parada en este conflictivo punto de la urbe, el coronel Iván Quiroz, director departamental de Tránsito de La Paz, admitió que “sensiblemente no tenemos efectivos” para controlar el tráfico en la citada plaza. “Ahora (desde ayer) estamos recibiendo el apoyo de personal de la Unipol (Universidad Policial). No podemos tenerlos permanentemente, pero estarán en las horas críticas, en horas pico”.

Los alumnos de esa universidad ayudarán a ordenar el tráfico al mediodía y entre 18.00 y 20.30. Consultado sobre si es necesario un semáforo en algunas de sus seis bocacalles, el jefe policial manifestó que evaluar ese requerimiento es competencia del Gobierno Municipal de La Paz.

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