Pese a que hay nuevos semáforos en las diferentes intersecciones situadas del primer al cuarto anillo y en las calles del centro, el congestionamiento vehicular da la sensación de que aumenta por la falta de sincronización de un cruce a otro, lo que preocupa a los conductores, tanto de vehículos de servicio público como de los particulares, que piden a la municipalidad que haga ver el anunciado programa de ‘semáforos inteligentes’.
Vecinos, como Guillermo Suárez, han escrito cartas al gobierno municipal para hacer saber su preocupación porque se pierde mucho tiempo tratando de recorrer en vehículo los anillos y las vías del casco viejo, donde los bocinazos por la impotencia de no poder pasar provocan estrés a los transeúntes y choferes.
Cruces conflictivos
Las intersecciones donde se forman largas filas de motorizados no solo en horas pico, están en la calle Libertad. La primera con la Buenos Aires, donde el semáforo no está coordinado con el de la siguiente esquina, en la Seoane, por donde pasan los micros y se forma una hilera de tres cuadras.
“Cuando en la Buenos Aires está en rojo, en la Seoane da verde, haciendo circular a los que vienen desde la Cuéllar, provocando el embotellamiento en la Libertad y los micros deben buscar algún resquicio por donde pasar”, anotó Pablo Laime, un chofer de micro.
Otro gran problema se genera en el nuevo semáforo de la rotonda del cuarto anillo y avenida Mutualista, donde toda clase de motorizados, incluyendo camiones y flotas, no respetan la señal roja y estorban el paso a los que circulan por el anillo desde la 2 de Agosto. “Cuando ocurra un accidente fatal, recién las autoridades van a venir a ver cómo funciona este cruce”, reclamó Mario Fuentes, un conductor.
“Tampoco se puede circular fluidamente por el segundo anillo desde la avenida Beni hasta la Virgen de Cotoca y viceversa, donde se debe esperar largos minutos en cada cruce, todo porque los semáforos no están en simultáneo”, manifestó Suárez.
Soluciones
Para despejar dudas ante los constantes reclamos de la gente, el director de Semáforos y Señalización, Rolando Ribera, explicó que el cambio de los antiguos aparatos en el centro recién comenzó el año pasado y la colocación en las intersecciones donde nunca hubo semáforos, tanto en los anillos como en otras avenidas, se inició en 2011, teniendo como meta contar con dos centenares de cruces hasta el 31 de diciembre de 2015.
“Hay ‘ola verde’ en cinco lugares de la ciudad, en especial en el segundo anillo, pero no se notará hasta que esté lista toda la red que es controlada desde el centro en Urbarí”, dijo Ribera.
De igual manera, en las intersecciones donde los semáforos no son respetados se pedirá ayuda de Tránsito para controlarlas
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