Haciendo cuentas, Wálter Miranda, de 70 años, calcula que abrazó a más de 20 personas en cinco minutos. Al principio, tuvo un poco de miedo, pero después se sintió cómodo y hasta feliz con los apapachos.
"Estoy contando y he abrazado a 20 personas. Quiero llegar a 30. Me siento feliz por dar y recibir abrazos. Se siente el calor humano. Es la primera vez que participo”, dijo Miranda, acompañado de su esposa y nieto.
Al igual que Miranda, cientos de ciudadanos y más de 120 Cebras intercambiaron abrazos por cinco minutos, en la tercera versión del Día del Abrazo, que se realizó ayer en el MegaCenter de Irpavi.
Una hora antes, las personas comenzaron a reunirse frente al escenario, instalado en el ingreso del complejo comercial. En el lugar, más de cuatro maestros de ceremonia animaron al público.
"Es un día especial. Un día para disfrutar y darse muchos abrazos”, gritó una de las animadoras, mientras decenas de personas, entre niños, jóvenes y adultos saltaban y bailaban al ritmo de rock, cumbia y folklore.
Cuando el reloj marcó las 12:00, el director de Cultura Ciudadana del municipio de La Paz, Sergio Caballero, anunció: "Llegó la hora del abrazo. El desafío es que cada uno de ustedes otorgue más de 80 abrazos”. En ese instante, las cebras y el público comenzaron a darse apapachos. Rosmery Choque, de 24 años, aseguró que es la primera vez que dio tantos. "Al principio, uno se siente un poco extraño por abrazar a desconocidos, pero después te da ganas de recibir más abrazos”, comentó.
Su compañero, Cristian Reynaga, no dejaba de sonreír porque ayer descubrió el valor de dar un abrazo al prójimo. "Es la primera vez que participo en esta actividad y me siento muy feliz”, dijo.
Por cinco minutos, en el ingreso del MegaCenter se observó una multitud que intercambiaba abrazos y también buenos deseos: "Le daré un abrazo”, "Que Dios le bendiga” y "Paz para todos” y "Es un gusto conocerlo”, entre otros.
Las Cebras, muy atareadas, correteaban de lado a lado repartiendo abrazos y posando en fotografías. "Nos sentimos felices de dar felicidad a los paceños”, comentó una de las educadoras urbanas, quien confesó que en cinco minutos abrazó más de 30 veces.
Los niños también fueron protagonistas de la jornada. "Estoy feliz porque he abrazado a muchas Cebritas”, dijo una de las pequeñas.
Tras concluir los cinco minutos, el grupo de rock Octavia ingresó al escenario y los asistentes lo recibieron con aplausos. Entonces, tocaron el tema La ciudad que habita en mí, acompañados de un ballet integrado por Cebras, que presentaron una coreografía especial.
Aunque no se logró romper el récord de los de 30.000 abrazos, Caballero explicó que la idea es que cada paceño dé cariño a quien encuentre en su camino y sea más feliz. "Llegamos a los más 10.000 o 15.000 abrazos. Pero estamos muy contentos porque la gente ha participado, ya que un abrazo ayuda a ser más felices”, comentó. Además del bienestar emocional, un abrazo mejora la salud de las personas, recalcó.
Miranda cree en esa hipótesis y está orgulloso del récord personal que marcó ayer, ya que fue la primera vez que abrazó a 20 personas en cinco minutos. "Me siento más feliz que nunca, hay que repetir”, comentó.
La tercera versión
Actividad El Día del Abrazo es parte del Programa de la Felicidad, impulsado por la Alcaldía de La Paz.
Propósito La actividad tiene el objetivo de dar a la ciudadanía herramientas para gestionar positivamente sus emociones.
Música El encuentro estuvo animado por el grupo de rock Octavia, que interpretó por más de una hora sus éxitos. Además, se organizaron otras actividades como meditaciones guiadas, musicoterapia y una
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